jueves, 4 de febrero de 2010

Morirte de entusiasmo

He acompañado a los encuentros de X muchas veces; no sé por qué me pide que salga con ella, aún habiéndola besado dos veces sin tocar sus pechos, ya debería haberme descartado. Normalmente hacia fuera me encuentro terriblemente aburrido, si no fuera por mis monólogos internos me quedaría dormido en cualquier sitio. Son bares los que mayormente frecuentamos, ninguno de los que hemos visitado me parece atractivo, así sea combinando lo exacto de cada uno de ellos, le faltaría tanto por llegar a ése de nombre “Vacaciones en la antártica”.

Entro al bar, X siempre se cuelga en los hombros de alguien, los saludos son efusivos, en ese momento disimulo reconociendo el garito, me aseguro si acaso hay algo que valga la pena, casi siempre lo encuentro. Hasta que X se acuerda de haberme insistido para que la acompañara. Hago un saludo tímido porque no me interesa ser protagonista, me siento entre todos ellos y bebo en silencio. A veces me gustaría ser camarero, estaría recibiendo algún dinero por estar allí y no pagándolo, además los camareros te ponen la cerveza y se callan sin la obligación de decir nada gracioso y a X le gusta que diga algo gracioso para sus amigos.

A X le gusta hablarme de sus ex's y a mi me encanta imaginar como mataría a todos esos tipos de mierda que se la han follado, en esto no hay novedad, lo hago con todas las X que conozco. Creo que por eso me invita a salir, por la sencilla razón que hace mucho no se sentía escuchada; alguna vez invité a salir a alguien que escuchaba, era la alumna mas distraída del salón, pensé que me entendía sin que pronuncie una palabra. No fue un buen recuerdo.

X me ha dicho que es algo negativa, que necesita llenar un vacío, enseguida me interesó, pensé que me diría que le podía tocar las tetas o quizás saber en que escala negativa se encontraba para no solo poderle tocar las tetas, no me dijo nada mas, ni dejo nada menos para la ilusión, pero yo pienso que su escala es el del hastío. Las personas negativas me atraen, pero no en su última escala que es la de la desesperanza, me gustan aquellas que oscilan entre la tristeza y la melancolía, pienso que las personas negativas en esa escala se mantiene vivas por medio de estímulos internos, esto no tiene que ver con la gente que conozco en los bares, ellos están tan cerca del objeto que se exceden en superficialidad, lo bueno es que me conservan en esperanza. El hastió por el contrario es una mierda, nunca se plantea seriamente el problema del sujeto y quizás por eso X me invita a salir, el hastió es un instinto precario y bosteza al cansancio. Por eso tengo miedo de hastiarme y la gente que conozco en los bares me hastía, entonces intento prescindir de la memoria como un loco que huye de la vida, hasta terminar completamente borracho en todos los bares de la ciudad, quizás y esto sí verdaderamente quizás, es por eso que quiera escuchar a todas las X del mundo y ver a sus amigos bostezar.