domingo, 6 de diciembre de 2009

Ese animal asustado

Camino hacia mi pasado, he trepado en ese viejo vagón que me llevaría a esa amalgama de recuerdos, simple rutina, nada extraordinario, por lo menos hoy no. He preferido ver a través de la ventana, me gusta verte a través de la ventana, con tu cabeza sostenida por esa lamina transparente, con tu mirada lacónica y extraviada.
Al otro lado de la ventana y en pleno movimiento las personas detenidas en la estación se desprenden, las luces se distorsionan y viajas a través de un túnel como en una interminable caracola que en escasos minutos recorre un ilimitado mundo, jirafas a galope y enormes rinocerontes se transforman en orugas y luciérnagas que anuncian la primera estación, entonces vuelvo al interior y ese otro mundo es desolador escasamente angosto, no cabe mucho a penas una bolsa de mercado con las sardinas a punto de salir y una botella de aceite que deja caer esa gota espesa lista para resbalar.
Cuando viajas en un vagón y no tienes mas salida que continuar, te detienes en los quehaceres de los viajeros, en sus prisas que en diciembre son los de consumir enormes almacenes de colores, no soporto que los almacenes sean de colores deberían ser grises y sus ventanales profúndamente oscuros, al verlas solo encontrarías tu reflejo, un rostro frío y un cuerpo vacío. Deberían embargar tus ropas y una pandilla de muchachos disidentes pintar de negro los ventanales.
A medida que voy imaginando este viaje me pregunto tantas cosas, ¿por qué ya no puedes fumar en los vagones? ¿por qué ya no se sienta ninguna mujer a lado mío con olor a sexo entre la piernas? y así me dejo de tantas especulaciones, ¿por qué nos pasamos la vida en un ir y regresar continuo? ¿y por qué no detengo ya este vagón y me bajo en ninguna estación, en la mitad de la caracola, al final de este túnel?.
Sin embargo han empezado a poner películas de vaqueros en los vagones, los niños corretean por sus pasillos desfundando sus dedos pistolas, sus brazos metralleta; las madres los regañan, casi todas están gordas y embarazadas, la muchacha mas atractiva sueña con ese bebe en su vientre, si tan solo alguien le haría daño.
Ya casi es mi estación, después de unos minutos todo esto habrá desaparecido.